Un juez federal ordenó la liberación inmediata de niños detenidos con sus padres en cárceles de inmigración de los Estados Unidos y criticó la detención prolongada de familias por parte del gobierno del presidente Donald Trump por la situación de salud actual en los Estados Unidos.
Esta orden incluye a niños migrantes detenidos por más de 20 días en tres centros de detención familiar en Texas y Pensilvania que son operados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Los defensores de los derechos de los inmigrantes argumentaron que ICE debería liberar a todas las familias de los centros de detención, particularmente porque el coronavirus se ha extendido rápidamente a través de las instalaciones.
En documentos judiciales publicados el jueves, ICE informó que 11 niños y padres han dado positivo por COVID-19 en el Centro de Detención Familiar de Karnes City, Texas.
En el centro de detención en la cercana ciudad de Dilley, al menos tres padres e hijos, incluido un niño pequeño que cumplió 2 esta semana, fueron colocados en aislamiento después de que dos contratistas privados y un funcionario de ICE dieran positivo para el virus.
Más de 2,500 personas bajo custodia de ICE han dado positivo para COVID-19. La agencia, por su parte, ha liberado al menos a 900 personas consideradas en mayor riesgo médico y ha reducido la población en sus tres centros de detención familiar.